LAS EMOCIONES Y EL EGO
Como habéis
percibido mis seguidores del blog llevo ya un largo periodo sin subir un
artículo. He de reconocer que estaba ansiosa por poder comunicar las enseñanzas
que llegan a mí de los maestros y, por ello, me he puesto como objetivo seguir
subiendo artículos más a menudo como lo hacía tiempo atrás. En esta ocasión
comparto con todos vosotros algunas de las reflexiones de los seres de luz
sobre las emociones y el ego.
He de decir
que este tema va totalmente relacionado con los cambios que han llegado a mi
vida; sin apenas darme cuenta me encuentro en una gran ciudad, soy más urbanita
de lo que creía ser y se han abierto un mundo de posibilidades a mi alrededor.
En todo este proceso he tenido que lidiar con mis emociones y con mis miedos
más profundos, aunque he de decir que me he dejado llevar y aconsejar por mis
guías que continuamente me recuerdan que el cambio ha sido del todo positivo y
que algo bueno está por llegar.
Las
emociones ¿cuántas alegrías nos dan? O en contra ¿cuántas frustraciones? Tengo
que admitir que hace unos años cuando escuchaba hablar de inteligencia
emocional lo dejaba pasar como si no fuera conmigo y sí relacionado con la
educación de los más pequeños. Yo fui a esa niña a la que le decían llorona y
dejó de llorar para encajar. Cuando descubrí que las emociones que no se
aceptan y no se reconocen se estancan dentro de ti y no te dejan avanzar ya el
simple hecho de descubrirlo me hizo despegar y volver a llorar. No ha sido
fácil mi camino en cuanto a aceptar las emociones (todavía sigo lidiando con
ellas) y menos aún, con la otra cuestión del artículo, la de aceptar el ego que
va de la mano del miedo, como otra parte de mí.
Y ahora doy
paso a las palabras de los guías y los seres de luz que han querido participar
hablándonos de las emociones y del ego, espero que disfrutéis tanto como yo con
sus enseñanzas.
<< Las emociones ¿cuántas habéis
identificado ya como humanos? Y ¿cuántas de ellas sabéis diferenciarlas? No
existe emoción buena o mala simplemente existen emociones que surgen a raíz de
situaciones o pensamientos. De niños, a la mayoría os enseñaron a dejar a un
lado las emociones, recriminándoos cuando se hacía notar alguna de ellas. Si
bien llorabais os reprochaban “no seáis llorones”; si sentíais alegría y lo
demostrabais riendo a carcajadas os decían “bajar el tono que no es para
tanto”; y si sentíais ira, culpa o rabia probablemente os darían un cachete
para que cortarais de raíz vuestra actitud con esas emociones. Por todo ello,
hoy como adultos no reconocéis la importancia de las emociones. Y ellas están
ahí para haceros despertar, con el fin de que reconozcáis grandes aprendizajes
para el bien de vuestra alma.
Debéis ser sinceros con vosotros mismos cuando
surja una emoción e identificarla, ponerla nombre y preguntarla directamente:
¿para qué se ha hecho percibir?, ¿qué es lo que te quiere decir?, ¿qué es lo
que ha activado en ti?
Debéis creeros que el universo existe
para llenaros de poder porque el poder en realidad sois vosotros y este nace de
lo más profundo de vuestro interior.
No solo hay que saber identificar esas que
catalogáis como negativas sino también agradecer esas que denomináis positivas.
A veces, no os dais cuenta que lo que creéis que os hace felices o eso que
deseáis tener os autodestruye porque simplemente no identificáis si viene de
vuestro ego o de vuestra verdadera esencia.
Y os preguntáis: ¿qué es lo que viene del ego y
que es lo que llega de la esencia? Y os respondemos: todo eso que os hace sentir
mal o falsamente bien, que aparece para evitar algo que os da miedo o que
simplemente no es parte de un bien superior o colectivo es lo que viene del
ego. Por su parte, todo eso que os hace sentir en paz, que os hace percibir
alegría sin algún tipo de remordimiento y que da comienzo desde el amor propio
para un bien colectivo, es lo que viene de la esencia que en realidad sois. Aquello
que viene de tu esencia te hace dar pasos hacia delante y contribuir a un bien
colectivo desde tu amor incondicional.
La vida es como un juego si no tomáis la
decisión de tirar los dados el avance difícilmente llega.
Y no es para nada negativo el reconocer que
ciertos pensamientos, acciones y emociones vienen del ego, ya que al
reconocerlas y aceptarlas superáis escalones de aprendizaje a nivel de
conciencia. En ocasiones, hay que experimentar y tomar decisiones que os hagan
salir de vuestra zona de confort para reconectaros con el propósito que vuestra
alma anhela. Es cierto que habéis de enfrentaros a vuestros miedos y en ocasiones
ir de la mano de ellos para poder dar pasos hacia delante y aceptar las
emociones que os llegan con el objetivo de encontrar en ellas vuestros vacíos o
vuestros deseos.
Nadie absolutamente nadie en el mundo terrenal
y humano se libera totalmente del ego; es difícil aceptarlo, pero hasta al más
evolucionado en ese sistema dual se le activa de vez en cuando su cerebro
reptiliano. Ese cerebro primitivo que busca la supervivencia por encima de todo
y que sin daros cuenta os sabotea a causa de la memoria que guarda el alma. Así que ¡date permiso para sentir ciertas
emociones! ¡date permiso para aceptar tu ego!
¿Cómo liberarse mayormente del ego? Aceptando
la realidad, contándote la verdad de lo que sientes y desde dónde actúas, si
actúas desde el amor y, por lo tanto, desde tu esencia o desde el miedo y el
ego. Prácticamente muchos desafíos en el mundo terrenal se solucionarían y se
verían de diferente forma si no os mentiríais a vosotros mismos y a las
personas que forman parte de vuestro día a día.
Cuando te empeñas en no ser sincero contigo
mismo lamentablemente sufres. La mentira puede venir de muchas formas
disfrazada y puedes no darte cuenta si quiera que existe. Cada persona tiene su
propia verdad, por las experiencias que ha vivido. Guarda en su memoria, formas
de hacer que un día le fueron útiles pero que si no hace de vez en cuando una
revisión de sus creencias y sus motivaciones puede estar viviendo en el día de
la marmota sin avanzar y sin crecer.
El alma cuando no aprende muere o se estanca,
así que una buena manera de enfrentarse a los desafíos de la vida es
aprendiendo de sí mismo y de todas aquellas cosas con las que puedes contribuir
a crear un mundo mejor y más lleno de paz. El aprender supone investigar y
poner en práctica lo aprendido para sentirse más a gusto en todos los sentidos.
Lo creáis o no los humanos no siempre hacen las
cosas para sentirse bien, lo hacen para evitar algún tipo de miedo y por ello
ese bienestar suele ser pasajero y creador de una culpa interna.
Los miedos más comunes que se suelen querer
evitar tienen que ver con el qué dirán, con el rechazo o con heridas de niño
interior que cargas sin haberte dado cuenta de ello. Todo esto son experiencias
que previamente habéis pactado para poder avanzar a nivel de conciencia. Así
que reíros y agradecer las cosas que os llegan porque agradeciendo dejareis a
un lado el victimismo y por tanto esa parte de vosotros que encuentra escusas y
no posibilidades.
La mayor parte de vuestros días en la
experiencia terrenal dais una importancia errónea a las emociones, os deberían
impulsar siempre hacia el aprendizaje de vosotros mismos, hacia la paz y hacia
vuestro interior y, sin embargo, os colocáis en modo lucha delante de ellas
para espantarlas y maldecirlas.
Cada vez que sintáis una emoción parar, inhalar
aire y exhalar lentamente; después preguntaros para qué está ahí y qué os
quiere transmitir. Hacerlo sin ningún tipo de expectativa, fluyendo y dejar así
que vuestro yo terrenal se haga uno con vuestro yo superior. Tal vez la
respuesta no sea clara o en el mismo instante que lanzáis la pregunta y os
dejáis sentir. En algunas ocasiones, puede aparecer a lo largo del día o de la
semana, puede que te llegue indirectamente la información a través de un video
de you tube o de alguna persona o mensaje que recibes, aunque si de verdad
estar abierto a recibir la contestación, esta te llegará de un modo u otro.
Quizás creáis que es algo tonto ponerse a
hablar con las emociones; sin embargo, si añadís más creatividad a vuestra vida
y os dejáis llevar por el corazón tratándoos con humildad esa conversación será
realmente beneficiosa. Y ahora sin más preámbulo nos despedimos aun estando con
vosotros. Os queremos y nos quitamos el sombrero hacia vuestros avances.>>
Espero que las palabras anteriores hayan
activado la reflexión y el aprendizaje hacia vosotros mismos. Yo por mi parte
siento que cada vez que me paro ante una emoción sin criticarla y sin enjuiciarla
y mantengo una conversación con ella aprendo una cosa nueva de mí y creo verdaderamente
que nada es más importante que conocerse a uno mismo para dar lo mejor de sí.
Si deseáis
indagar más sobre las heridas del niño interior os invito a que echéis un
vistazo al siguiente artículo: https://mejorandomiyo.blogspot.com/2020/04/las-heridas-del-nino-interior.html en él se
explica más detenidamente las heridas pasadas que pueden estar afectándoos de
manera poco productiva.
Como siempre, antes de acabar os pido que me dejéis comentarios, que compartáis el artícul
o en las redes sociales y con todas esas personas que creáis puede beneficiarlas.
¡GRACIAS,
GRACIAS, GRACIAS!
¡Un saludo para ti!! Muchas gracias por leer mi blog.
Vanesa Garin ¡Aquí y
ahora!
Gracias Vanesa por compartir esta canalización. Ojalá podamos disfrutar de muchas más. Son un regalo.
ResponderEliminarPreciosos e inmensamente necesarios mensajes, Vanesa, GRACIAS GRACIAS GRACIAS por tu labor, tu cariño, generosidad y la sabiduría que transmites a través de tus palabras.🙏😘
ResponderEliminarMuchas gracias vanesa por tu cercanía . y sobre todo el transmitir que no somos solo un materia solida y física .Que hay mas .que hay una energía universal que deberíamos de empezar a reconocerla con amor y abundancia .Sin mas decirte gracias de corazón por tu labor .
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