¿Y A TI QUÉ TE HACE SENTIR GRATITUD?
¿Qué sientes cuando escuchas decir gracias? Y ¿al expresarlo?
¿cuántas veces lo decimos al cabo del día? Y ahora bien ¿en cuántas situaciones
lo dices con un sentimiento puro que llega desde el corazón?
La gratitud es una energía poderosa que nos transforma, si de
verdad la incluimos en nuestros días. Todas las personas sabemos lo que es la
gratitud y el agradecimiento y lo hemos experimentado alguna vez en nuestra
existencia.
¿Qué es la gratitud y el
agradecimiento?
Según Wikipedia la gratitud es un sentimiento, emoción o actitud
de reconocimiento de un beneficio que se ha recibido o se recibirá. Y el
agradecimiento es una actitud de reconocimiento por algo que se ha recibido, un
beneficio, un gesto o un favor.
He elegido estas definiciones porque a mi parecer son las que
más se ajustan a su significado, aunque podéis buscar por curiosidad las mismas
palabras en la Real Academia de la Lengua, en Internet, para ver qué os parece
la diferencia.
El agradecimiento en la infancia
Recuerdo días en mi niñez agradeciendo las cosas que apreciaba
en mi vida antes de irme a la cama y después con el tiempo esa práctica la
perdí, tal vez porque lo enfoqué más como una práctica de la religión católica
y no tanto como una práctica necesaria en mí.
Cuando somos pequeños una de las primeras palabras que nos
enseñan y de alguna manera nos obligan a decir es ¡Gracias! Interiorizamos tanto esta expresión como
seres humanos que con el tiempo no nos damos cuenta que ha perdido toda su verdadera
esencia, que se dice como un automatismo y que algunas veces ni siquiera es
sincero y se hace por compromiso en una situación u otra.
Con esto no quiero decir que no se enseñe a decir gracias a los
niños, hay que hacerlo, es una manera de iniciarles en la educación emocional y
de tener en cuenta los sentimientos del otro desde muy pequeñitos. Aunque
quedará bien integrado como algo necesario para ellos si los adultos a su cargo
utilizan la palabra ¡Gracias! De una forma alegre y sincera.
Además, estaría realmente bien que los padres y/o madres
explicarán a sus hijos. ¿por qué han dado las gracias, cómo se han sentido con
la actitud de la otra persona y, por último, cómo se han sentido al decir esas
palabras?
Contestando a estas preguntas tan simples, ayudamos a los niños
a desarrollar la empatía hacia los otros y como adultos incluimos esa práctica
sana en nuestros días.
¿Y cuando aparecen obstáculos
en nuestra vida?
Es inevitable que las personas pasemos por momentos
desagradables o no tan fáciles para nosotros en diferentes momentos de nuestra
vida. Cuando aparecen dificultades es más común enfocarnos en lo que nos está
causando malestar y, por lo tanto, en lo que no queremos para nosotros, que
enfocarnos en lo positivo que puede tener para un crecimiento personal esa
situación que acontece.
El psicólogo Rick Hanson lo explica así: “Tu cerebro es como
velcro para las experiencias negativas y cómo teflón para experiencias
positivas” Sin embargo debemos de tener en cuenta que un estudio de Gable y
Haidt revela que tenemos de media el triple de experiencias positivas que
negativas. ¡Pero nuestros cerebros tienden a fijarse en lo negativo y a olvidar
lo positivo! ¿Cuál es el antídoto perfecto para esto? La gratitud.
El victimismo y la queja nos alejan de nuestro bienestar,
tenemos que responsabilizarnos de cuáles son las emociones que deseamos en nosotros
mismos para expresarlas hacía los demás. Con este tipo de responsabilidad unido
a sentir gratitud por las cosas que sí tienes, te iras acercando más a tu
empoderamiento personal. Y es eso lo que quieres ¿verdad?
“Olvida lo que te hirió en el
pasado… pero nunca olvides lo que esa herida te enseño.”
Elsa Punset.
Los beneficios de la gratitud
según algunos estudios
Existen muchos estudios que demuestran que las personas más
agradecidas tienden a mostrar menos problemas de salud, tanto físicos como
emocionales, valoran sus vidas de una forma más positiva con esperanza y
optimismo, se enfocan mejor en sus metas cumpliéndolas y viven de forma más
sana.
Expresar gratitud cambia la estructura molecular de nuestro
cerebro, puesto que mantiene la materia gris en funcionamiento convirtiéndonos
en personas más saludables y más felices. También estos estudios revelan que
las personas más agradecidas rinden un promedio de 1,5 horas más en sus
trabajos y sirven de apoyo emocional a otras personas en su vida.
Un grupo de científicos chinos, por su parte, encontró que los
niveles más altos de gratitud se asociaban a un mejor sueño y a escalas más
bajas de ansiedad y depresión.
Otra investigación con veteranos de la guerra de Vietnam,
descubrió que las personas que experimentaban mayores niveles de estrés
postraumático y mejora de la resiliencia.
“La mejor arma contra el estrés
es nuestra habilidad para elegir un pensamiento en lugar de otro.”
William James
La gratitud también ayuda a las personas que lo practican a
tener relaciones de éxito a largo plazo y a sentirse mejor con ellos mismos.
La gratitud y la Ley de la
Atracción
El perdón y la gratitud son dos de las fórmulas más potentes
para elevar nuestra vibración, de enfocarnos en las cosas positivas y el camino
para obtener lo que realmente se desea. Estas dos acciones sinceras forman
parte imprescindible para la manifestación de cualquier deseo y va unido con el
tan comentado principio de la Ley de la Atracción. El perdón, en un primer
momento nos ayuda a romper con ataduras del pasado limpiando lo que no se
quiere, esa parte que tenías dolida en tu corazón, y, ya después, con la
gratitud llenas este fantástico órgano de lo que sí deseas. Del perdón ya
escribí en otro artículo, te invito a que lo eches un vistazo.
La Ley de la atracción es la creencia de que los pensamientos
conscientes e inconscientes influyen sobre las vidas de las personas,
argumentando que son unidades energéticas que devolverán a las personas una
onda energética similar a la emitida. Si deseas conocer más sobre esta ley
puedes leer libros como: La voz de tu alma (Lain Garcia Calvo), El Secreto
(Rhonda Byrme) o el Secreto Faltante de Joe Vitale.
Activar la GRATITUD abrirá los
ojos de tu mente para los MILAGROS que ya existen en tu vida. Y es el camino
más rápido para ver los MILAGROS que ESTÁN POR VENIR.
Laín García Calvo
Algunos ejercicios para activar
la energía de la gratitud
1.
Escribe tu diario de gratitud. Hay un montón de ejemplos en internet y más concretamente en
YouTube de cómo puedes crear un diario de gratitud propio. Considero que es una
cosa muy personal y que deberías hacerlo a tu gusto. Yo por ejemplo tengo un
diario específico para añadir mis agradecimientos diarios y en un primero
momento los decoraba con diferentes recortes y dibujos, pero como los llenaba
tan rápido al final opte por comprarme cuadernos chulos con páginas en
blanco.
Así que ¡tú decides! Escribir
agradecimientos en tu diario de gratitud te hará ir incluyendo esa energía en
tus días y enfocarte en todo aquello que tu das por supuesto, pero que otras
personas no pueden disfrutar. Agradecer antes de irte a la cama y/o por la
mañana al despertar mínimo 10 cosas por las que te sientes agradecido. ¿Qué te
parecen muchas? Piensa… ¿Tienes un lugar dónde dormir?, ¿tienes personas con
las que compartir tu vida? ¿puedes oír? ¿puedes ver? ¿Comes cada día?...
“Nunca dejes que las que las cosas que tú QUIERES te hagan
olvidar las cosas que ya tienes”
Laín García Calvo
2.
Agradece mentalmente. Si te da pereza
escribir en un diario, puedes hacerlo mentalmente antes de irte a dormir,
cuando ya estés en la cama o a la mañana al despertar. Cuando tengas que
agradecer algo a otra persona durante el día hazlo con una sonrisa sincera y
piensa en todas esas preguntas que he comentado en el apartado de la infancia.
Involucra todas las partes de ti en el agradecimiento, es decir, mente, cuerpo,
alma y espíritu y, no esperes en ningún caso recibir lo que das, piensa que
cada persona está luchando su propia batalla diaria.
3.
Céntrate en área del corazón.
Este es un ejercicio muy potente que a mí me
encanta y que se lo ahí comentar en un video a Laín: Haz un par de
respiraciones profundas. Piensa en algo que te hace feliz y pon la mano en tu
corazón. Céntrate mentalmente en el área del corazón e imagina que la palabra
gracias brota desde dentro de tu corazón. Ahora imagina que la palabra sube
desde ahí y se pasea por tu cuerpo, hasta llegar a tu garganta y brota por tu
boca. Mientras lo haces siente la
vibración que emite en tu mano el corazón cuando dices esa palabra tan hermosa
“GRACIAS”
“Comencé dando las gracias por pequeñas cosas y, mientras más
agradecida me sentía, más crecían mis riquezas. Eso es porque aquello en lo que
te concentras se expande, y cuando te concentras en la bondad en tu vida, creas
más bondad. Las oportunidades, las relaciones, incluso el dinero, fluyeron
hacía mí cuando aprendí a ser agradecida independientemente de lo que me
sucedería.”
Oprah Winfrey
Mi experiencia
Debo decir que enfocarme cada día en eso que tengo y puedo
disfrutar me hace sentirme más y más feliz, más y más anclada en el aquí y en
el ahora y, más y más empoderada. Siento que es algo que tuve olvidado durante
gran parte de mi vida y me llevaba a victimizarme y juzgar.
Aunque hay veces
que todavía sale esa parte de mí que detesto y a la vez acepto sé que poco a
poco y con el trabajo que realizo diariamente en mí eso ira cambiando. Además,
como ya he comentado en alguna ocasión, desde que empecé este camino de
conocimiento interior mi vida ha sido y supongo que será cómo un viaje en
montaña rusa. Espero que te animes a empezar o a seguir con este viaje.
¡Conócete, acéptate y lo más importante quiérete!
Y ya para acabar
este artículo y con mis mejores deseos os dejo unas palabras que a mí me suben
muchísimo la vibración, espero sinceramente que os gusten y os hagan sentir lo
que me hacen sentir a mí.
“Gratitud dulce palabra donde las haya que te llena el corazón de
amor y paz, impregnándote de una tranquilidad que te hace flotar allí donde
estés.
Es lo que falta en vuestros días… sí las personas de este planeta
dejarán a un lado toda preocupación, queja o victimismo, la gratitud ganará la
batalla al miedo. Al miedo que sentís a perder vuestras casas, vuestros hijos,
vuestros animales, vuestros trabajos… Miedo a perder todo lo que pensáis que es
vuestro y en verdad no lo es. Es parte de un todo, una pequeña pieza de un
rompecabezas que solo cambiará de forma cuando ya no esté.
La gratitud es un amor puro incondicional que se activa en
nuestros días cuando sentimos tanto amor hacía nosotros mismos como por el
otro. “Otro”, visto como un ser humano o como un animal, un espacio…
La energía de la gratitud se activa con un simple gesto de
reconocimiento, con un regalo no esperado, con un piropo expresado, con una
sonrisa sincera…algunos lo reconocéis en la mirada de un niño, es decir, en
todo aquello que te transmite amor, cariño, reconocimiento.
Debéis agradecer un nuevo día porque otros muchos no despertaron.
Cuando os miráis al espejo debéis sentiros agradecidos por poder
ver vuestro reflejo.
Cuando oís la primera voz o el primer sonido del día debéis
sentiros agradecidos por poder escuchar.
Cuando sentís el agua en vuestra cara, debéis agradecer por
poder sentir…
Con solo disfrutar de vuestros sentidos ¿no creéis que ya
deberíais sentiros agradecidos? Muchos no lo agradecéis porque lo dais por sentado,
pero debéis reconoceros a vosotros mismos que algunas personas o niños no
pueden disfrutar de todos sus sentidos.
Y ¿qué hay de todo aquello que tenéis? Un sitio con techo donde
dormir, comida para llevar a vuestra boca, ropa con la que sentiros calientes y
esos lujos que a veces los creéis necesarios y no lo son tanto.
Gratitud es la energía que cuando se activa en la Tierra aumenta
la vibración del planeta. Va de la mano del AMOR y cuando se unen pueden
hacer…producir… ¡VIDA!”
Energía de la Gratitud
¡Un saludo para ti!! Muchas gracias por
leer mi blog.
Vanesa Garin ¡Aquí y ahora!
Muchísimas gracias Vane por recordarme que tengo muchas cosas de las que otros carecen
ResponderEliminarGracias de todo corazon
Un beso
Marta
Me gusta, mucho que cada día, te, sientas mejor haciendo lo que te gusta mil besos guapaaa
ResponderEliminar